Tu cesta está vacía en estos momentos
¿Te gustaría darle un toque original a tu vivienda? En ese caso, ten presente que la instalación de unas puertas correderas de madera son una apuesta segura, capaz de aportar ese cambio de aires que buscas en tu decoración de interiores. Las puertas correderas son elementos de madera que se deslizan hacia delante y hacia atrás mediante un sistema basado en guías o rieles. Al instalar un sistema de puertas correderas, se genera una sensación de amplitud en la estancia en cuestión. Como la puerta corredera se desliza siempre con una pared como referencia, permiten ahorrar el espacio que ocupa una puerta con un funcionamiento estándar. En Wovar, tu ferretería online de confianza, encontrarás diferentes tipos de guías para puertas correderas con las que podrás realizar tu instalación de forma rápida y sencilla. En la presente entrada de nuestro blog, te dejamos algunos consejos sobre la manera más eficiente de construir una puerta corredera de madera a medida y te ofrecemos a continuación un práctico plano de instalación.
El tipo de madera ideal para una puerta corredera
Antes de empezar a fabricar una puerta corredera, es importante elegir el tipo de madera adecuado. Un material muy utilizado en este tipo de construcciones es el abeto, ya que se puede adquirir en casi cualquier sitio además de ser un tipo de madera especialmente adecuado para su uso en interiores. La madera de abeto es fácil de trabajar y bastante estable; por otro lado, sus nudos le aportan un aspecto desenfadado muy característico. Además, las lamas de abeto se pueden pintar o barnizar fácilmente.
Otra especie de madera que se encuentra a menudo en los interiores de estilo moderno es el roble. Sin embargo, se trata de un material mucho más pesado y no tan fácil de adquirir. En cualquier caso, nuestro consejo es contactar con tu comercio maderero de confianza para que te informe sobre los pros y las contras de los distintos tipos de madera para interiores de los que dispone. Por las razones que hemos señalado previamente, durante el desarrollo de la presente entrada de nuestro blog utilizaremos como referencia el abeto cepillado.
La construcción de una puerta corredera
Antes de empezar a fabricar una corredera, mide cuidadosamente el hueco por donde quieres que pase la puerta. Asegúrate de que haya un solapamiento de unos tres centímetros tanto en el lado izquierdo como en el derecho. De este modo, el hueco de la puerta quedará eficientemente sellado y no quedará ninguna abertura a los lados. Recuerda que en la parte inferior de la puerta debe quedar un espacio libre de al menos 1 cm por debajo, pero que no es necesario que se ocupe espacio extra en la parte superior. Por último, es importante tener en cuenta que el grosor de la puerta a instalar no debe superar los 45 mm. Ahora que ya conocemos las dimensiones de la puerta, podemos empezar a cortar las tablas a medida.
Empezaremos por el marco que sirve de base a la puerta corredera de madera. Lo haremos con tablas de 14,3 cm de ancho. Corta 2 tablas del ancho total de la puerta, que serán las tablas inferior y superior de la base. A continuación, coge otras dos tablas y córtalas a la medida necesaria de altura de la puerta. Nota: A esta altura total habría que restarle el doble de la anchura de la tabla. En nuestro caso, 14,3 x 2 nos da un total 28,6 cm. Esto permite que los 2 largos encajen sin problemas entre la balda inferior y la superior, proporcionando además una solidez considerable a la puerta corredera. Colocamos otra viga horizontal en medio del marco básico, que también se debe acortar para adaptarla a la medida adecuada. Las dos piezas diagonales serían las últimas en colocarse; ahora continuaremos con el revestimiento de la puerta corredera.
Instalación de puertas correderas
Naturalmente, una puerta corredera de madera necesita tener una resistencia considerable. Para garantizar una conexión sólida entre los distintos tablones, usaremos distintos anchos para el revestimiento de nuestra puerta corredera. Puedes elegir tablas más estrechas o más anchas que el marco; la elección es tuya. Nosotros utilizaremos tablas de 11,9 cm para el revestimiento. Cortamos todos estos tablones a la medida de la altura total y los colocamos uno al lado del otro. Si los tablones no terminan de quedar igualados, asegura una distribución uniforme acortando la primera y la última tabla de tu puerta. Lo ideal es hacer que la puerta corredera tenga un tamaño que se adapte con precisión a los anchos completos de los tablones seleccionados.
Prepara una superficie recta y cúbrela con film de construcción si es necesario. Coloca los tablones para el revestimiento ordenadamente uno al lado del otro y mide las longitudes en ángulo con una cinta métrica. Si ambas longitudes en diagonal son exactamente iguales, habrás colocado los tablones en el ángulo perfecto. Una vez que los tablones de revestimiento queden bien colocados, pégalos con cola D3 para madera. Esto asegura una base estable y un conjunto sólido y resistente. Utiliza sargentos para unir firmemente todas las tablas entre sí y deja que la cola se seque completamente antes de continuar. Si es necesario, coloca peso adicional sobre las madera para añadir una presión extra y, por tanto, un conjunto más sólido todavía.
Puertas correderas a medida
Una vez que la cola se haya secado, podemos continuar con la construcción de la puerta. Tu puerta corredera basa su fuerza en el marco que has confeccionado previamente. Coloca los tablones en la parte posterior del revestimiento encolado y pégalos firmemente. Sujeta las tablas con un sargento y fíjalas con tornillos galvanizados para aglomerado. Perfora los correspondientes agujeros de montaje con una broca fina para madera; de este modo evitarás astillar la superficie de tu puerta. Utiliza dos o cuatro tornillos por cada intersección de tablas. Estos tornillos aportarán solidez al conjunto y le darán un toque característico a su acabado.
Ahora que el marco base está unido a la moldura, tu puerta ya está tomando forma. Por último, mide las secciones en diagonal que irán en los compartimentos abiertos; estas proporcionan una resistencia extra a tu estructura. Estas secciones diagonales deberían formar un ángulo preciso de 45 grados. Nuestro consejo es que midas este punto con suficiente antelación. La mejor forma de cortarlo es usando una sierra circular que pueda girar hasta un ángulo determinado. Asegúrate de utilizar un disco para sierra circular debidamente afilado para evitar que la madera se astille. Usa de nuevo cola D3 para madera a la hora de pegar estas planchas y fíjalas con tornillos para aglomerado.
Puertas correeras sobre guías
Llegado a este punto, tu puerta corredera de madera ya estaría lista para su uso, solo necesitarías elegir los tiradores o manillas a instalar. Te invitamos en este sentido a echar un vistazo a nuestra selección de herrajes para puertas correderas así como a nuestros sistemas para puertas correderas. Reproduce el siguiente vídeo para tener un ejemplo de la instalación de tus puertas correderas; el audio está en neerlandés, pero, incluso si no tienes conocimientos sobre el idioma, podrás usarlo como apoyo visual extra antes de ponerte manos a la obra. Sobre todo, recomendamos imprimir el práctico esquema de instrucciones adjunto en la parte superior de esta entrada antes de empezar a fabricar tu nueva puerta corredera.